La Isla de la Tortuga de Rebelión Animal tiene una cultura regenerativa. Ponemos el amor, el cuidado, el respeto, la honestidad y la integridad en el centro de lo que hacemos. Trabajamos duro pero sabemos cómo descansar. Somos un movimiento que da la bienvenida a todos y a cada parte de uno, para que ningún individuo quede fuera de la acción para lograr el objetivo de nuestro movimiento. Nos inspiramos no sólo en la acción humana sino también en la resistencia animal, y creemos en la co-creación de un mundo con individuos de todas las especies para un futuro justo y seguro.

Debido a que todos nacimos en un sistema especista que no fue creado por nosotros, nuestra demanda y mensaje se centra en cambiar el sistema. No existimos para pedir a los individuos que se vuelvan vegetarianos, sino para cambiar el sistema alimentario en su totalidad. Así que mientras damos la bienvenida al cambio personal, las acciones de Rebelión Animal se centran en el cambio del sistema y las demandas que llaman al gobierno a decir la verdad, a actuar ahora, y a ir más allá de la política en las emergencias climáticas y ecológicas que enfrentamos.